Audi renueva uno de sus modelos más populares. Y es que el Q5 se ha convertido en un top ventas, con más de dos millones y medio de unidades puestas en carretera. Ahora le toca el turno a una tercera generación que contará con dos carrocerías, la SUV y la fastback, personalmente la más atractiva con esa caída en la parte trasera que incrementa, de forma considerable, la sensación de deportividad. Así que, probamos el nuevo Audi Q5.
Es indudable que su aspecto es impactante. Con una simple mirada enamora, con una gran parrilla y unas grandes tomas de aire en los laterales. Todo ello con una nueva firma lumínica, que incluye la tecnología Matrix Led.
Con 4.72 metros de largo puede parecer un vehículo complicado de manejar, pero la realidad es totalmente diferente. El conductor cuenta con una buena altura, regulable, lo que permite tener una visión perfecta, facilitando su uso. Es fácil manejarlo en todos los entornos, lo que hace que sea muy fácil hacerse al vehículo.
En su interior, destacaría las tres pantallas, cuatro si incluimos el “head up display”. Tras el volante tenemos una de 11.9 pulgadas. En la consola central incorpora una de 14.5 pulgadas que integra nuestro teléfono móvil. La última pantalla es la que tiene delante el copiloto. En ella podrá utilizar diferentes aplicaciones entre las que nos podemos encontrar juegos, youtube o, incluso, un karaoke.
En lo que a propulsores se refiere, de entrada, contará con tres motores. Para más adelante quedará el híbrido enchufable. Los tres cuentan con la tecnología MHEV Plus, con lo que podrán entrada en la Zonas de Bajas Emisiones a tener la etiqueta ECO.
Motorizaciones
El motor gasolina es un 2.0 TFSI de 204 CV y 340 Nm de par, pudiendo elegir entre tracción delantera o quattro. Habrá una versión diésel, también microhíbrida, con un 2.0 TDI de 204 CV. En lo más alto de la gama, los modelos SQ5 montarán un V6 TFSI de tres litros con una potencia máxima de 367 CV. Los tres modelos contarán con una transmisión S Tronic de doble embrague con siete velocidades.
No defrauda el nuevo Audi Q5 en carretera. El vehículo responde cuando le pedimos en curva. Destaca el silencio al rodar, con una buena insonorización. La caja de cambios no defrauda y es un excelente aliado cuando rodamos en carretera.
Hay tres acabados, Advance, S Line y Black Line. El precio del Audi Q5 parte de los 61.600 euros hasta los 94.690 euros. Para la carrocería Sportback hay que sumarle 2.310 euros.
